Una estancia en la costa a buen precio

Biarritz, estación de balnearios cerca de la frontera española, reúne un amplio abanico de actividades. Ahora bien, ¿qué hacer en Biarritz con un presupuesto ajustado? Nuestro equipo ha escogido cinco lugares emblemáticos que descubrir para aprovechar al máximo esta pequeña perla del País Vasco.

Biarritz, vista desde las alturas

Desde el aeropuerto ve al faro, de 73 m de altura, construido sobre la punta de Saint-Martin. Tendrás que superar sus 248 escalones antes de alcanzar la cima. El sublime panorama que se abre ante tus ojos, con las Landas de un lado y el País Vasco del otro, será uno de los momentos cumbre de la estancia.

Un lugar de oración

La capilla imperial, a 15 min a pie del faro, es una joya arquitectónica que se construyó en 1864 por deseo de la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III. En su interior descubrirás una rica decoración de estilo hispano-morisco y romano-bizantino, en boga en el Segundo Imperio.

En honor a la Virgen

Tu paseo te llevará hasta la roca de la Virgen. Este espacio natural se denomina así por la estatua de la Virgen que está sobre él. Se colocó allí en señal de agradecimiento después de que la Virgen salvara a los balleneros en una tormenta. Para llegar a este lugar tendrás que atravesar una pasarela realizada por Gustave Eiffel.

Apetitosa tentación

Si sigues hacia el sur, párate en Planète, museo del chocolate, donde este producto te desvelará todos sus secretos: cultura, fabricación, degustación… También se programan talleres para los aficionados.

En las playas

Tu excursión por Biarritz culminará con un momento de relajación en una de sus muchas extensiones de arena: la costa de los Vascos, la playa de Miramar, de Marbella, de la Milady, del Puerto Viejo y la gran playa. Unas veces salvajes, otras turísticas, no cabe duda de que estas playas serán de tu agrado.